11.6.09

Café Tacuba (2)


¿En rockotitlan? Sí, en el de Coapa. (Alguna vez hubo un rockotitlan en Coapa y luego se volvió "La casa de la abuela", o al revés )
No manches, el café en Coapa…

Tenía que ir, claro que tenía que ir, estaba a media hora de mi hogar.

Ese día tuve que mentir en casa, habría un concierto del Café y yo iba a ir con mi amiga. Así que a sacar los ahorros, a pedir dinero, a inventar cuentos para conseguir el permiso y a lanzarme a lo que yo ya sabía, sería una noche inolvidable.

Llegamos por ahí de las 9, yo con escasos recursos y mi amiga Irene rebosante de dinero, como siempre. El lugar me parecía increíble, (digo aún era menor de edad y todo me parecía increíble) había barra libre. ¿Saben lo que significa para un par de pubertas la barra libre?

Pues bebimos un par de cosas que servían en caballitos y a las que se les prendía fuego, luego una cerveza y mientras tanto, Meme, (¡sí era Meme!), se sienta cerquita de nosotras y pide una cerveza, unas 10 personas que ya lo reconocían se acercaron y le pidieron autógrafos, él platicaba con todos y hasta nos regalo un par de sonrisas, las dos estábamos atónitas. ¡Es que era Meme! Y luego Joselo, otra cerveza por favor. Ni me acuerdo que dijeron. Yo solo podía mirarlos y sonreír estúpidamente, mi mente vagaba entre “la Ingrata” y “el Baile y el salón”, no se cuanto tiempo paso, pero sé que esas dos cervezas me hicieron volar (y eso que en casa ya me habían formado como buena bebedora de cerveza, “más vale que aprendas desde ahorita a que luego los pinches chamacos te emborrachen” y vaya que aprendí).

De pronto se desaparecieron y unos minutos después estaban en el escenario. Yo ya tenía un “Gin and tonic” en las manos, “la Bombay es la mejor”, nos dijo un cantinero.

Y tampoco me acuerdo de cual fue la primera rola, ni de las que siguieron, recuerdo mi cuerpo sintiendo la música, bailando como nunca, todo era un sueño, la gente muy cerca de mi, todos coreando al unísono, todos sintiendo esa estampida de emociones, ¡las bebidas llegaban a mi solitas! No sé cuanto bebí, sé cuanto gocé, solo eso.

De pronto un empujón me hizo volver a la realidad, mi amiga estaba peleando. ¡Wey no mames, venimos a disfrutar, mándalos a la verga¡, ¡pero me están pegando!, no peles vamos para el otro lado.

En el trayecto miré el reloj, ya era la una de la mañana. ¡La una!, nuestra hora de regreso eran las doce, yo apenas iba a cumplir 16 años (soy hija única y tenía muchos límites). Ya no fue lo mismo, pero ya casi habían tocado todas las rolas ya solo era cosa de esperar unos minutos.

No pude presenciar el aplauso final, no pude terminar de cantar “las batallas en el desierto”, mi amiga, quien ya había sido amonestada por un tipo de seguridad, se empezó a pelear a golpes con una fulana miscelánea y las sacaron cargando. Yo no me dí cuenta, pero mientras yo bailaba, mi amiga bebía y bebía, y cuando la sacaron estaba al borde de la congestión alcohólica. Escuche “Esa noche” afuera del lugar, mientras trataba de mantenerla en pie y subirla a un taxi. Ninguno quiso llevarnos, tal vez porque Irene tenía mucho vómito en la ropa o porque yo estaba muy alterada.

Su estado era tal, que me empujo a la avenida y casi me mata un coche, tuve mucho miedo, ella se echo a correr por la avenida diciéndome aburrida y ñoña, yo la perseguía mirando hacia todos lados, no quería que nada malo nos pasara, le gritaba, le suplicaba que se detuviera, pero me dijo que ella se estaba divirtiendo, que y no la iba a detener y que no me necesitaba, así que me enoje, me detuve y le dije que yo me largaba, ya sola paré un taxi (que sí se detuvo), cuando vio que me subía, corrió para alcanzarme.

Vivíamos a unas cuantas casas de distancia, así que la deje en su puerta y le dije, que jamás volviera a dirigirme la palabra (yo pocas veces me enojo, pero cuando lo hago, soy muy radical).

Camine hacía mi casa, dispuesta a recibir un tremendo regaño, entre haciendo el menor ruido posible, pero nadie me estaba esperando, y me encerré en mi cuarto a llorar. Pocos minutos después, tocaron el timbre. Era su padre, polaco, medio loco y tartamudo (y reconocidísimo académico de la UAM). Todos se despertaron y nadie le entendía.

Resulta que Irene, había entrado, vomitado, despertado a todos y luego se había ido, según ella a arreglar unos asuntos conmigo.

Pero en su borrachera no llego a mi casa, (eran 6 casas de distancia) se quedo dormida en un árbol del otro lado de la cuadra. Pero su papá no la halló, fue a mi casa, armo un lío tartamudo y a mí me fue como en feria.

En mi enojo, le dije a su padre que no volvieran a buscarme y le saque todas sus pertenencias a la calle, (cassettes, discos, libros, el material para hacer pulseras, la baraja para leer ficticiamente las cartas, ropa y demás chunches que los adolescentes botan en casa de sus amigos). Nuestros padres decidieron que lo mejor era que no volviéramos a vernos.

Esa noche perdí la edición de colección del “Re”, vi derrumbarse mi primer negocio (de pulseras y collares), tuve mi primera borrachera, mi primer conflicto "policiaco - alcohólico", el primer encuentro con la fría realidad de la ciudad, fue la primera vez que sentí la responsabilidad de que alguién más dependiera de mi y también perdí a una de mis mejores amigas. Aprendí que el tiempo no regresa y que por más que intentemos, nada vuelve a ser igual.

Me hice dos promesas, nunca iba a perder la cordura por el alcohol y nunca permitiría que alguien me arruinara de nuevo un concierto del Café.

Cuando su padre murió poco tiempo después, nos reencontramos, pero éramos como dos desconocidas, nisiquiera pudimos abrazarnos o mirarnos a los ojos. Volvimos a salir juntas, pero ya nunca fue lo mismo.

Esta entrada está dedicada, con todo el cariño de la nostalgia a Irene y al fin de la infancia. También a su padre, el Maestro Ian Patula.

10.6.09

Dicen que...



Dicen que lo de hoy, es anular el voto.
Es la tendencia, es una protesta, una forma de demostrarle a la clase política de nuestro país que ya estamos hartos y que como ciudadanos unidos, estamos haciendo algo al respecto...



Pero también dicen que:

"Detrás de www.votaenblanco.org.mx están los hermanos Bolaños Vera: Luis y María.

Luis Alberto Bolaños fue quien registro el dominio votaenblanco.org.mx el pasado 20 febrero, y "curiosamente" también están a su nombre los de vicentefox.org.mx, centrofox.org.mx y vamosmexico.org.mx. Fue parte del equipo de transición de Vicente Fox con un sueldito de 65 mil 739 pesos con 30 centavos por los 3 meses… y ya después, como Director General del Sistema de Internet de la Presidencia, alcanzó un sueldo mensual de 105 mil 922 pesos.

María de las Mercedes Bolaños Vera, en tiempos de Fox, fungió como subdirectora de Análisis y Evaluación de la Dirección General de Opinión Pública, dependiente de la Coordinación General de Opinión Pública e Imagen de la Presidencia de la República, con un salario mensual de 20 mil 941 pesos con 31 centavos. Antes, en el equipo de transición cobró en total 65 mil 739 pesos con 30 centavos. Y "curiosamente" María de las Mercedes es quien abrió el grupo voto en blanco en facebook.

(Otra hermanita, Patricia Bolaños Vera, fue parte del "complo" de Fox contra el peje)

Y...

Detrás de la página www.tacheatodos.com (registrada el 23 de abril) esta Gabriel Hinojosa Rivero ¡¡¡Primo de Felipe Calderón, y primer alcalde del Partido Acción Nacional de Puebla capital!!! Estos caones tienen hasta concurso de video y cartel. ¡No mamar!

Ni dudo que el tal Bolaños vio mover por los blogs el meme que usted saco el 4 de febrero, y semanas después comenzó (o comenzaron... el tal Bolaños o cualquiera de los weyes que segurito monitorean la red) a planear "algo". Y digo, comenzaron, porque como dicen acá, la familia Bolaños parece estar muy unida con los Fox ¿será?"

Tomado de: http://edgarclement.blogspot.com/2009/06/pues-parece-que-esto-ai-la-lleva.html (es un comentario de "suavecito")

Señores, todo puede ser posible.

9.6.09

Café Tacuba (1)


El Café Tacuba es mi banda.
Desde que iba en la “secun” y descubrí su primer disco, me volví “fans” (“fans” es más cabrón que “fan”). Los escuché por primera vez en mis épocas de temprana adolescencia, cuando escuchaba “Rock 101” porque tenían la mejor música y pasaban “rock en español”, cuando a las bandas mexicanas nadie más las programaba en radio (y no había muchas).

Me dijeron en la escuela que leyera “Las batallas en el desierto” de José Emilio Pacheco y me dejo un excelente sabor de boca, claro, después de las tediosas lecturas de literatura naturalista latinoamericana (no se si aún les digan así), Pacheco, es revitalizante. Y un día escucho “Las batallas”. Cuando eres un pinchi puberto que empieza a gozar de la lectura y te das cuenta que la literatura y la música que escuchas no están peleadas y que pueden ir de la mano, el mundo se ilumina.

...Sí, seguro que habla del libro de Pacheco, es que es obvio, me decía a mi misma. Y sí, “por alto que este el cielo en el mundo, por hondo que sea el mar profundo, no habrá una barrera en el mundo, que mi amor profundo no rompa por ti” y entonces recordé el bolerito y los sábados por la tarde en mi casa en compañía de mis tíos, y asocié todo. Era mi descubrimiento y nadie podía quitármelo.

Yo de por si, ya me sentía súper alternativa (claro que en ese tiempo esa palabra aún no estaba de moda) por escuchar Rock 101 y empezar a leer a Kerouac y Ginsberg (ni entendía nada), entonces no podía dejar de apoyar las nuevas propuestas, así que como pude conseguí el cassette, directamente de Tepito.

Lo escuche y lo escuche y lo escuche miles de veces, hasta que en una (mítica también) edición de “La Mosca” leí una reseña sobre el nuevo disco del Café Tacuba. Obvio no recuerdo las palabras exactas, pero decía algo como: “¿Quebradita, banda o cumbia? El nuevo disco de Café Tacuba, “Re”, no tiene forma, ni pies, ni cabeza, ¿que trataron de hacer?”
Y seguro el pobre tipo que escribió eso se maldijo para toda su vida, pues un par de meses después, todos elogiaban el nuevo album que se convertiría en un clásico.

Junte mis domingos, mis pasajes, vendí pulseritas y hasta leí la mano en Coyoacán, y junto con mi amiga Irene, compramos la edición especial del disco de “Re”. De las primeras bandas con ediciones especiales, era una cobertura para la caja del disco de cartulina tipo estraza, con un suaje en forma de caracol al centro, dentro la caja del disco, el boocklet me hizo querer ser diseñadora.

Pero yo no tenía reproductor de CDs, (impensable ahora, ¿no?) así que iba todas las tardes a escuchar el disco con mi amiga, hasta que compre mi propio reproductor y se lo agandallé. (Luego nos peleamos y lo perdí para siempre.)

El disco de “Re” es para mí, el mejor del Café, es un disco cíclico, un perfecto universo, un conjunto de elementos auditivos que viajan a través de mi país y sus distintas percepciones, es un disco crítico y a su vez increíblemente bello, revelador diría yo. Un parteaguas. Te va transportando poco a poco y sin que lo percibas. Inicialmente es de difícil digestión, pero una vez que lo interpretas, claro, cada quien lo interpreta a su manera, es fantástico, uno va recorriendo poco a poco diferentes momentos de una historia que resulta ser nuestra, llámenme loca, pero así es.

Eso sin contar la osadia que representa que un cuarteto de tipos, decidieran alejarse de todo lo convencional y rescatar sonidos típicos del folklor mexicano para expresarse y volverse un fenómeno social. No hay un estereotipo que pueda encerrar al Café, no hay una clasificación que pueda contenerlos. Es el Café y ya.

Y puedo seguir y seguir, pero por ahora, solo dejo la canción que representa esta etapa de mi vida.

http://www.youtube.com/watch?v=ev2OovAtp_k

Estuve buscando una foto de cuando se presentaron en “Siempre en domingo”, pero no la hallé, lo mas cercano es éste video de algún programa igual de feo llamado “El sabor de la noche”.

http://www.youtube.com/watch?v=ZQPQ1JD4cDc


4.6.09

Adendum


Ahora unas colaboraciones del buen {lifeSystem.Data}

En albur me ganas…

Entre menos grosero, más fino es el albur. Es como una combate, en donde todo tiene que ver con que te “coges” al oponente. Usas palabras comunes haciendo oraciones de doble significado, lo importante es que la oración se entienda de cualquier forma, a veces no tienen nada que ver con la conversación entre el alburero y el albureado, por ejemplo:

- mmmmmmh!!! Me comí una torta de frijoles
- Saaaaco (sacudo pa´no barrer, también se podría usar)

No tiene nada que ver con la primera oracion, pero en el doble sentido sí y ps si no le entiendes ya no puedes hacerle el contra albur (llave, ps la contrallave) y ps te cogen.
El albur es un arte. "Arte acá del barrio".

- En esa cola si me formo

- Te bajo la regla a chupetones... mamacita

-¿cuanto te costo tu nueva mac?
-Adivina
-10mil
-Me costo más

- El chico te mido

- El chico medallas de la colonia

- Tanta carne y yo chimuelo

- ¿Que te ofrezco? leche, te, chocolate

- ¿Que chichocas no te quitan la licencia?

- Traéte las tetates

- Una torta de milargueza con pitomate

- Quisiera ser aguacate pa´embarrarme en tu torta

- ¿Que comen los pajaritos? ...macita

- ¿Que comen las ardillitas? ...bellotas

- Apachurro, mojo y despeino

-Vamos a matar al oso a puñaladas


Para aprender más...
Es muy recomendable ver unas pelis de ficheras con los masters de masters, pero para que no las tengan que ver en fin de semana en la tele, les dejo esta liga que me encontre pa que mejor las bajen:

http://peliculasmexicanasffm.blogspot.com/2009_05_01_archive.html

...pero al burro se la mamas.

Retomando la finura del lenguaje…


Es el español nuestra lengua madre, y sea dicho sin albur, ¡que rica nuestra madre!
Lenguaje florido, capaz de expresar hasta el más ínfimo detalle, siempre tiene la palabra correcta, la más adecuada, la más cercana a lo que queramos decir, si sabemos usarlo, claro.

Es tan rica la lengua madre (y no la lengua de la madre) que hasta nos permite expresarnos en doble sentido y ¿por qué no? hasta en triple…

Señores, con ustedes: los albures.

Conversando con Minoru Genda, sabio en la materia, pero con ciertos límites y con el buen Choper, docto en la “ñeres”, según sus propias palabras, me he dado a la tarea de exponer algunos de los más comunes albures a los que una chica, (no digamos una mami, una chica de mediano buen ver) esta expuesta en un recorrido común y corriente por las calles y avenidas de la ciudá.

Como esto será largo (sin albur), me permito ofrecerles la primera de varias partes (que complicado escribir sin pensar en doble sentido).

Nótese la importancia de la ortografía y redacción para comprender correctamente el sentido del albur, sobre todo de forma escrita, ya que gritado a media calle y con intención “jariosa”, es inconfundible.

¡Ahí vamos!
Primero dedicado a las chicas:

- De tu arte a mi arte, prefiero miarte.

-Hasta el más chimuelo masca fierros y el más pelón se hace trenzas

- ¡Que curvas y yo sin frenos!

- ¡Ay mamá los de la luz y yo sin medidor!

- Préstala pa´ no cambiar o préstala pa´ payasear

- Yo soy aquel
Sácame el chile y juega con él

- Ya tengo hambre
Pos trágate ésta, que ya estas grande

- Se le descalabro el mono, tons no hay fiesta

- Reina, no se apene y siéntese a leer

- Namas deja le sumo la cuenta

Mai: Ponga su corazón, que le quiero llegar a su centro

Chica: me dan ganas de besarlo, fino caballero, si no fuera porque usted está pelón, lo invitaba a sentarse a platicar conmigo

- Me da la impresión que se le perdió el reloj
- Ay wey, agáchese que se le cayó, allá abajo yo lo vi
- Nomás aguas porque como que huele medio feo
- Debe ser su drenaje
- ¿No quiere que se lo destape?
-
Acá traigo la herramienta

Ya se que están chafones, pero espero su amable cooperación. Se que no van a decepcionarme, la neta, la neta, eso del albur, no se los manejo.

3.6.09

Y ya entrados…


Acá los oriundos no manejan la finura de lenguaje del chilango. De hecho, los oriundos creen que son ellos los que hablan bien. (¿?)

Resulta que cuando empiezas a socializar, invariablemente te dicen ¿porque no tienes acento chilango?
– ¿Acento chilango?
– Sí, “¿Qué paaaso? (frase “cantadita” con la que siempre creen que nos arremedan el acento)

Y uno sonríe y piensa para sí mismo, carajo, esto es lo que aprendemos en la televisión, no todos los del defe hablamos como “el Vitor”.

Y es triste darse cuenta que la imagen que los grandes monopolios televisivos proyectan del chilango promedio es esa: un “mai” que habla “cantadito” y te alburea a la menor provocación.

Señores de “fueras”: no todos los oriundos del defe somos como el “Vitor” y la “Jacaranda” así como no todos los provincianos son campesinos o son damas de la vela perpetua o los regios son “tacaños” o los yucatecos hablan con “bombas” o los guatemaltecos son “marasalvatruchas” o los argentinos “mamones”, o los cubanos “vividores y oportunistas” o todos los peruanos “feos”.


Chingao, ¿Por qué generalizar? ¿No es acaso también una forma de discriminar?

Quesadillas


- ¿Me da una quesadilla de queso con papa por favor?
- mmm ¿una quesadilla con guisado?
- no, una quesadilla de papa
- a ver, las quesadillas son de queso, por eso son quesadillas (pendeja)
- NO! Las quesadillas son quesadillas y se les ponen cosas como papa o queso
- Las QUESAdillas son de QUESO, si quiere algo extra es con guisado. ¡Señorita, no estoy jugando!
¡Ni yo!
¡Cuanta cerrazón! Las quesadillas, “las kekas”, ¿cómo me vienen a dar a mi una cátedra de quesadillas, si he comido eso toda la vida?
Quesadilla es un nombre genérico, ¿no?
Acaso he vivido engañada toda mi vida…

Quesadilla; dicese de aquella tortilla rellena de “cualquier pinchi cosa”… ¿o eso es un taco?

Ay… ¿Qué chingados es una keka?

Todos somos chilangos...


Pues sí, resulta muy difícil adaptarse al cambio.

Primero estamos hasta la madre de la ciudad, el tránsito, la gente, el bullicio.TODO te molesta. TODO te parece mal.
Deseas la tranquila vida de provincia y piensas, ¿dónde esta la calidad de vida? ¿de mi vida?

Porque trasladarse durante dos horas al trabajo para llegar, rendir al 50% de tus capacidades y luego aventarte otras dos horas para regresar a casa, durante 5 días de la semana, te hacen sentir que estás pagando una penitencia. Súmale oler por las mañanas la exquisita mezcla de perfume barato y aliento mañanero, y por la tarde el inconfundible aroma a “pasuco” (patas, sudor y culo), aguantarte los arrimones en el metro, arriesgar tu vida en el trayecto que te toca andar en “micro”, luego, si te toca caminar, soportar estoicamente los “mamacita”, “sssss”, “sabrosa” y demás finezas que nos regalan algunos “caballeros” y para terminar pelearte con el vecino gandalla que siempre estaciona su coche en tu entrada o con el que pone su basura en tu reja o con el que se roba las revistas a las que tú estás suscrito.

Eso, como dicen por ahí, es sobrevivir, no vivir.

Así que un día, te armas de valor, mandas al carajo todo y te largas, porque estás convencido de que la tranquilidad te vendrá bien, te vas a relajar, vas a rendir mucho más, es una excelente decisión, la vida en provincia es barata, la “calidad de vida” es infinitamente superior, estás abriendo las puertas de un mundo absolutamente mejor.

Llegas, te instalas, te enfrentas a la “tranquilidad” con la que todos los oriundos se manejan, la mala calidad de los servicios y la ausencia de muchos, pero esta bien, es lo que buscabas, ¿no?

Y luego cuando ya estás en el punto de no regreso, te das cuenta de que la “calidad de vida” es en realidad (gulp) “AUSENCIA DE VIDA”. Porque no hay un carajo que hacer. Hay un solo pinche cine, que únicamente pone pelis horribles, (de esas de acción con fémina sabrosa y mucha, mucha violencia). Porque hay 5 antros y en todos ponen a timbiriche y la rola de la novela del momento (también en los bares). Porque si no tienes cable, ya te la pelaste pues solo se ven el 2 y el 13 (y en el 5 y 12 respectivamente). Porque los oriundos piensan que el tránsito pesado equivale a 5 coches en la fila. Porque no hay oxxos 24 horas y no hay donde comprar más chela en la noche. Porque no hay MUSEOS y si te atreves a preguntar por discos o pelis en la “única librería”, te ven feo y te dicen: “esto es una LIBRERÍA, no vendemos discos”.

Y tú, con los ojos vidriosos, solo puedes bajar la mirada y salir poco a poco, mientras en tu cabeza te inunda la nostalgia y solo atinas a gritarte en silencio: PENDEJA, PENDEJA, PENDEJA.

Pero no esta tan mal, no puede estar tan mal, si fuera así entonces ¡nadie viviría en provincia!
Mmm, ahora me queda claro porque “hay tanto pinchi chilango”.
Ahhh porque esa es otra, aquí, lejos de la ciudad o más bien, en cualquier lado que no sea la ciudad, aquel que viene del DF o zona conurbada es un “chilango” (despectiva y peyorativamente). A ellos no les interesa saber que el “chilango” es aquel provinciano que se va a la ciudad. No, aquí todos los del DF y zona conurbada somos chilangos.