Andaba pensando que era un cristal dorado, cuando entendió que nomás era el puro reflejo…
- Eso de buscar amantes pa.. encontrarse a uno mismo, es muy mortificante… y le dio un trago al ron y miró de frente a la mujer…
---ya no me acuerdo de ti para nada, ya hasta se me olvido la clave lada… llámame Pedro, llámame Juan, llámame ahora, llámame ya... llámame por teléfono, nada más, no me llames por cobrar… en tu cuerpo encontré la felicidad, no sabía que era una venta, no sabía que estaba en renta, hasta que… me pasaste la cuenta…---
No era tener que pagar por amor… era que lo había tenido tan cerca y lo había dejado escapar porque tenía miedo… invento distancias y pretextos… busco tanto su seguridad que se quedo solo; solo y seguro de que nunca volvería…
Mejor vete, le dijo… era apenas una muchachita… no quería caer tan bajo… no podía.
Otro sorbo de ron y la habitación vacía…
Extrañaba los besos y la atención, se sentía tan estúpido por haberse avergonzado, el amor jamás debe esconderse, el amor no es motivo de vergüenza… la soledad sí.
¿Qué dirían los amigos si veían que estaba enamorado?… ¿cómo le explicaría a las otras mujeres de su vida que se sentía cómodo y contento?... ¿Cómo se explicaba a si mismo solo y medio desnudo en un motel de paso?
Y es que pasan los años y cada vez se vuelve más difícil… uno espera tanto y pretende dar tan poco, uno se vuelve desconfiado y arisco… uno se vuelve viejo…
Otro trago de ron y un recuerdo que palpita… ¿dónde estarás princesa?
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